Vete para ti (Lej Leja) de tu país'. ¿Qué significa "para ti "? La Torá podría haber dicho simplemente: “Vete” de tu país. Sin embargo, en hebreo y en otros idiomas, cuando dices 'vete para ti ' la intención es que te vayas solo, sin traer a otros contigo.
¿Quiénes son los otros que el Santo, bendito sea, le ordena a Abraham que no se lleve consigo? La respuesta parecería ser todos sus seguidores, aquellos llamados 'las almas que hicieron en Harán'. Inicialmente, antes de que Dios se le revelara, Abraham estaba estableciendo una comunidad religiosa de personas que creían únicamente en el concepto monoteísta. Y para Abraham, la tentación era continuar con este trabajo, en el plano del individuo. Pero Dios quería que nuestro antepasado Abraham se elevara a un nivel superior, que “saltara” a un nivel superior, al plano general. Dios le promete: 'Y haré de ti una gran nación'. Es decir, también es necesario establecer entidades políticas y nacionales. Necesitas establecer una nación.
¿Por qué? Porque para rectificar a otras naciones y no sólo a individuos se necesita una nación propia. La misión del Pueblo de Israel es audaz. Queremos rectificar no sólo al individuo sino también a toda la sociedad que está organizada como estados, y Abraham se debía encargar ahora de esto. Después de que está escrito: "Y Abraham fue como Dios le había dicho", dice la Torá: "Y Abraham tomó a Sara su esposa y a Lot, el hijo de su hermano, y todos sus bienes que habían reunido, y las almas que habían hecho en Harán”.
Nuestros sabios dijeron que Abraham salió dos veces. Una vez para cumplir la misión divina de establecer una nación, y para eso necesitaba hacerlo solo. La segunda vez pretendía incluir a todos, continuar con su idea cosmopolita de influir en todos los individuos del mundo.
Entonces, Abraham nuestro antepasado realizó dos visiones juntas. La visión de rectificar lo individual y la visión de rectificar lo general. Debido a esto, Abraham se transformó de Abram en Abraham. Abraham, es decir, padre de muchas naciones.
¿Cómo se puede ser padre de muchas naciones? Precisamente manteniendo su singularidad. Sorprendentemente, a Abraham se le informa que él es el padre de muchas naciones específicamente cuando realiza la circuncisión. Es evidente que la circuncisión lo distinguió física y espiritualmente del resto del mundo. Así podemos aprender que, si realmente queremos influir en el mundo, debemos mantener cierta singularidad y particularidad. La particularidad judía, la preservación de nuestra propia identidad, es lo que nos permite ser el “padre de muchas naciones”. Esto contrasta con la tentación de pensar que el camino de asimilación a las culturas del mundo nos permitirá influir en ellas. La Torá nos revela que precisamente al regresar a 'nosotros mismos' traemos una bendición al mundo entero.